Nunca hubo ninguna intención ni conversación entre los funcionarios de WWE de detener el show, y Vince McMahon brevemente se encargó de lo que estaba ocurriendo con Lawler antes de regresar a sus funciones en la producción. Según los informes, fue Triple H el que dirigió a la gente sobre lo que debían hacer después de que Lawler fuese sacado en camilla.
Triple H también intentó calmar los ánimos de los trabajadores de WWE en bastidores, quienes se encontraban muy preocupados y angustiados por la grave situación acontecida.
Todo lo que Michael Cole dijo durante las grabaciones en referencia al ataque cardíaco de Lawler, fue, palabra por palabra, lo que Vince McMahon le estaba ordenando que dijera a través del auricular.
A pesar de no detener unas grabaciones en vivo, la compañía si decidió cancelar la "Pat Patterson Appreciation Night" que iba a tener lugar después del show.